Mañana:Conversacion con angel(Octaba Parte)

Fueron años soñando ese momento, noches y noches de mi vida y sin embargo conocerlo lo había cambiado todo inclusive hasta mis sueños.

Aquel día encerrada en el ropero escuchando esos disparos, con tanto miedo, iba creciendo y me acercaba al culpable, me convertía en su amiga, su socia, su confidente, lo seducía hasta tenerlo justo donde lo quería y era ahí donde cambiaba.

Lo tenia amarrado en su silla, yo sostenía un arma en mis manos, estaba muy enojada, realmente enfadada, gritándole sus culpas en la cara mientras lo apuntaba, todo mi odio, mi desprecio, el suplicaba pero no podía sentir ninguna lastima por el y mi sed de venganza y el odio crecía cada vez mas dentro de mi hasta que era tan fuerte que tan solo apretaba el gatillo y lo veía morir delante de mis ojos con un extraño sentimiento como placentero hasta que la puerta de la oficina se abre sorpresivamente y me daba vuelta y veía sus ojos, no tengo palabras para explicar esa mirada, entre triste y confundida, dolida y sorprendida, dejaba caer al suelo el arma que aun se encontraba en mis manos, el salía corriendo y yo gritaba su nombre pero apenas parecía que lo susurraba… Ángel y quería gritarlo mas fuerte pero las palabras no salían de mi boca…Ángel…repetía una y otra vez sin pronunciar palabra alguna y el cada vez se alejaba mas y mas y quería correr detrás de el pero parecía estar pegada al piso asi que seguía gritando su nombre, me daba por vencida en mi intento de correr y con lagrimas recorriendo mi rostro me tiraba en el piso y con lo ultimo de mis fuerzas gritaba fuertemente…Ángel.

Y fue así como desperté gritando su nombre, completamente transpirada y totalmente angustiada, el estaba a mi lado mirándome

Ángel- ¿Qué ocurrió?, ¿Una pesadilla?

Amaia- Si, solo fue eso una pesadilla.

Ángel- Gritabas mi nombre…

Amaia- Es que tú estabas allí, te alejabas de mí cada vez más y no podía alcanzarte

Ángel- Pues no tienes de que preocuparte, estoy aquí y no pienso alejarme nunca de ti.

Amaia- Ojala así sea, pero a veces siento que hay algo que podría alejarnos demasiado

Ángel- No digas tonterías, nada podría alejarme de ti, sabes que te amo mas que a nada en este mundo- el acaricio mi rostro

Amaia- y yo te amo a ti- y luego tan solo nos besamos.

Ángel- Deberías seguir durmiendo apenas son las tres de la mañana.

Amaia- Claro, ¡que descanses!

Ángel- Tu también.

Y nos quedamos dormidos abrazándonos como solíamos hacerlo hace meses desde que el se había mudado a mi departamento. Estábamos tan bien y me hacia tan feliz pero sin embargo este secreto me estaba pudriendo por dentro.

Al otro día el otro Ángel me sorprendió con su presencia:

Amaia-Últimamente te haces presente seguido pero no dices nada, ¿no?, ¿Por qué lo haces?

-No lo se, supongo que solo para verte.

Amaia-¿Pero no lo haces siempre?

-No de esta forma, te veo de una manera distinta

Amaia-¿Cuál es la diferencia?

-Puedo sentir tu presencia y tú la mía-entonces calle por unos segundos y el dijo:-He tomado una decisión… esta será tu última vida conmigo por lo menos como tu protector

Amaia- ¿Porque has tomado esa decisión?

-Me he dado cuenta que hay cosas que necesito volver a aprender, no esta bien que este ahora aquí, así, hay cosas que aun puedo sentir que no debería y tu lo sabes

Amaia-¿Sientes celos por el no es cierto?, ¿aun puedes sentir cosas por mi?

-Jamás deje de sentirlas aunque no debía, ahora se que mi decisión en ese momento no fue la correcta.

Amaia-¿y Luz ella también?

-No ella es tu guía y no te dejara hasta que sea el momento

Amaia-Entonces, ¿vienes a despedirte?

-No todavía, aun no es tiempo pero cuando lo sea lo haré.

Amaia- Eso espero.