Ayer: “Entre el cielo y la tierra” Parte 4

Ella desde ese día se volvió mi amante, mi amiga, mi confidente y mi compañera, la puse a cantar en el coro de la banda y estábamos siempre juntos y así lo hacíamos todo, se que suena a la pareja perfecta pero también discutíamos quizás no por cosas importantes pero creo que nuestra chispa estaba en nuestras tontas discusiones como excusas para luego reconciliarnos, lamentablemente solía ser yo el ofendido, dejarla gritando agarrar mi campera e irme y cerrar la puerta de un portazo, subir a mi moto y dirigirme a ningún lugar solo conducía, para regresar a las dos o tres horas y pidiéndole disculpas aunque a veces no sé ni quién de los dos había empezado la pelea:

- ¡Siempre me haces lo mismo, estoy tan cansada de ti¿¡porque siempre tienes que avergonzarme en frente de todos?! Y hoy tenias que hacerlo en medio del show también… que necesidad tenias…

-Vida discúlpame, es solo un chiste, no te pongas así…

-Ah, es “solo un chiste” y entonces ¿porque siempre lo dices y a todo el mundo? Si no te gusta como canto..no me hagas hacerlo..

-Nena..si me gusta como cantas, es solo una broma..

-¡Si, si.. es solo una broma ahora y para ti! Te lo he dicho un millón de veces y lo sigues haciendo, ¡si es una broma déjame aclararte algo DETESTO TUS BROMAS!

- Sabes que…Puedes seguir gritando sola…loca – tome mi campera y me dirigí hacia la puerta

-¡Claro no, me ofendes, te burlas de mi y el que se va ofendido eres tu…! – Tomo un repasador que había en la mesa y me lo reboleo- ¡TE DETESTO!…

Quisiera poder contarles como vuelvo a las dos horas pidiéndole disculpas y nos reconciliamos como ya dije…pero eso no es lo que sucede y de hecho ya no regrese…

Ella se había dormido vestida aun esperándome en el sofá y la despertó el teléfono sonando en la mesita de al lado…

-Hola…Quien habla…Si soy yo…Ocurrió algo…Dígame que no es cierto… – respondió mientras de sus ojos comenzaron a caer muchas lagrimas – no puede ser…– Y colgó.

Les voy a contar la parte que no tenía idea hasta que regrese ella sufrió mucho habíamos estado juntos durante ocho años y un golpe así inesperado debe doler…Ella se arrepintió todos los días que siguieron de que sus últimas palabras hayan sido “te detesto”, todos los meses me visitaba en el cementerio se sentaba allí y me hablaba como si yo la pudiera escuchar y una y otra vez volvía a pedirme disculpas y decirme que le hubiera gustado poder decirme te amo.

Luego de dos años un día un muchacho fue a visitar la tumba de al lado a la mía con flores en sus manos, ella lo vio dejarle flores y murmurar despacio y como era inevitable con su elocuencia y si su necesidad de estar ahí para todos, se le acerco.

-Un familiar cercano

-Mi padre

-Lo siento

-Te lo agradezco pero era sabido y lo mejor

-Creo que cuando uno sufre, si ya no se puede hacer es lo mejor.

-Pasaste por algo así

-No, fue un accidente..

-Ahora el que lo siente soy yo…

-Está bien, ya pasaron dos años y uno continua

-Así es la vida sigue, era alguien cercano

-Mi pareja…- El se quedo mirándola

-Y siempre vienes

-Es una tontería…pero siento que lo tengo cerca

-Sí, se exactamente a lo que te refieres..Bueno ya debo irme..

- Si, si, yo también, el se levanto y estaba por irse cuando se dio media vuelta la volvió a mirar y dijo:

-Disculpa…Tu nombre

-Cecilia.

-El mío es Joaquín, ¿Te gustaría tomar un café?

-Claro…porque no.

Yo era la parte corta en su vida y el era la larga, en todas yo los acercaba sin saberlo, él era el que estaba ahí en sus mejores momentos, con el tenia esa familia que conmigo nunca llegaba a tener.